Doce tristes cuentos lo componen personajes de vidas complejas que sobreviven a acontecimientos vitales estresantes y que aceptan su trágico destino. Sus protagonistas son personas desarraigadas o sin soporte emocional.
En estos doce relatos resuena el retrato cotidiano e íntimo de personas atribuladas, fracasadas y estigmatizadas sociales, que nos podemos cruzar por la calle cualquier día, vistas con una mirada inquieta, sin mitos ni tabÚes. Y estos personajes están repletos de desafortunados azares que, a pesar de todas las desdichas, buscan incansablemente un camino de esperanza.