¿Qué y para qué sirve el ISBN?

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Escribir un libro supone un arduo trabajo de creación, estructuración, construcción, redacción y corrección de la obra. Sin importar el género, producir una obra literaria conlleva un esfuerzo que, en algunos casos, puede significar años en la vida del autor.

Algunos escritores consideran que el trabajo ha terminado cuando escriben el punto final de sus obras. Es ahí justamente cuando inicia un proceso nada atractivo desde el punto de vista creativo pero imprescindible para que la obra sea divulgada.

El trabajo de autoedición de libros, diseño, maquetación y revisiones técnicas se debe combinar con un trabajo correspondiente a registros legales y comerciales de la obra. Cada obra literaria debe llevar una identificación estándar e internacional que permita su distribución y clasificación de manera eficaz. Algo así como el número de pasaporte de cada libro. 

El International Standard Book Number o ISBN, es el código internacional que identifica, clasifica y permite sistematizar a cada libro de manera normalizada.  Este número es usado en todos los países del mundo de la misma forma y es único para cada edición.

Aunque para publicar un libro no es imprescindible tener un número ISBN, es fundamental para la correcta identificación y clasificación universal.  En la actualidad, la mayoría de las librerías físicas y virtuales exigen este número como requisito indispensable para la comercialización de obras literarias. 

Cualquier libro, incluidos los publicados bajo el formato de autoedición, deben poseer un ISBN como parte fundamental de su identificación internacional. El proceso de obtener un ISBN no es complicado ni costoso. Sin embargo, muchos autores no tienen conocimiento sobre cómo obtenerlo o la magnitud de su importancia.


¿Qué es exactamente el ISBN?

El ISBN es una codificación internacional y normalizada de clasificación e identificación de todas las obras publicadas en el mundo entero. El International Standard Book Number, es una identificación numérica que establece un código único e irrepetible para cada libro publicado. Basado en una codificación internacional de 13 dígitos, cada edición es ingresada dentro de un sistema global de identificación de libros.

Como la huella dactilar, el DNI o número de pasaporte, el ISBN es único, insustituible e irrepetible para cada libro.

Los 13 dígitos del ISBN, separados por un guión, se descomponen de la siguiente manera:

  • “ISBN” como prefijo alfabético indicador de cada obra.
  • Un código de 3 dígitos que identifica el tipo de publicación. En la actualidad todos los libros comienzan con el prefijo 978 o 979.
  • Una codificación entre 1 y 5 números que identifican al país en donde se ha hecho la edición del libro. 

Este número, no solo puede identificar al país sino a un grupo de registro determinado, por ejemplo el grupo lingüístico o región geográfica de distribución.

  • Un código de hasta 7 números que identifica al sello editorial encargado de la edición, publicación y/o distribución de la obra.
  • La identificación de la publicación y/o formato de la edición de la obra. Este código es único por cada edición, es por ello que un mismo libro tendrá un ISBN por cada edición.

Por último, establece un número de control y seguridad que valida al resto de los números del código. Este número va al final y funge como validador de los dígitos previos.


¿Sin un ISBN no puedo vender mi libro?

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Aunque es usado en la mayoría de los sistemas de comercialización y distribución de libros en librerías y puntos de venta, no otorga ningún valor comercial al libro. El ISBN se establece como identificador incluso de aquellos libros de distribución gratuita, parte de colecciones privadas o publicados sin ánimo de lucro.

La confusión sobre el valor comercial del libro se origina por el hecho de ser un requisito prácticamente indispensable por parte de librerías y distribuidoras. Incluso los puntos de venta online, de autoedición y de formatos electrónicos exigen un ISBN como requisito comercial indispensable de sus obras.

Las casas comerciales exigen una codificación ISBN a los libros que exponen en sus catálogos y estanterías, pues son una herramienta de clasificación fundamental. Los sistemas informáticos se basan en el ISBN como único identificador que permite a las librerías identificar, cuantificar y valorar sus inventarios.

Del mismo modo que el resto de los productos comerciales en el mundo, el ISBN provee información crucial sobre las características del libro. De forma automatizada y sistematizada, el identificador permite almacenar, distribuir y contabilizar los libros de manera mucho más eficiente.

Usando sistemas que integran los depósitos físicos, cadenas de distribución y valor comercial de cada libro, las librerías pueden llevar un control de sus inventarios. Asimismo, utilizan el ISBN como base informática para cuantificar ventas, ingresos, rentabilidad y otras estadísticas comerciales importantes.

Las bibliotecas, colecciones y depósitos de libros usan el ISBN como identificador físico que optimiza sus labores diarias en gran medida.


¿El ISBN otorga propiedad intelectual de un libro?

El ISBN y el Registro de Propiedad Intelectual, son dos elementos muy diferentes dentro de los aspectos legales que rodean a un libro. El número de identificación internacional no es considerado en ningún sistema legal del mundo como un factor de propiedad o derechos de autor. De hecho, un mismo libro puede tener varios ISBN dependiendo de las ediciones, zona de tirada o idioma en el que se publica.

En ciertos tipos de publicaciones como revistas, colecciones, compendios o enciclopedias, cada parte individual puede tener un ISBN diferente. Los derechos de autor y propiedad intelectual establecen la posesión de derechos legales y económicos sobre la reproducción, distribución y venta de una obra.


¿Cómo obtener el ISBN?

Obtener el número de identificación internacional de un libro es un proceso relativamente sencillo y que no tiene un coste significativo para el autor. Sin embargo y a menos que el autor decida hacer un proceso de autoedición, es la editorial quien se encarga de solicitar y registrar el ISBN. Dado que el ISBN es un número que identifica una edición en particular y no una obra en general, debe hacerse por la casa editorial del libro.


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